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“La Luna de Miel” (I y II Parte)

By Gonzalo.

 

[by Sebastián]a imponente iglesia se encontraba expectante esperando la llegada de la novia que llevaba varios minutos de retraso, Selva, la novia se encontraba bajando del auto mientras la impaciencia rondaba en el ambiente. Todos miraban a Gonzalo el novio que parecía desmayarse de los nervios y la impaciencia, él sabia que a Selva no le importaba mucho esta ceremonia pero para su familia y para el mismo era parte de sus más firmes creencias.

Selva entró súbitamente y la presión pareció ceder, todos la miraron fascinados por su hermosura, su largo vestido blanco, y su cabello recogido daba la sensación de una dama antigua que impactaba a cualquiera que la observara, su rostro cubierto levemente, y su ramo en la mano conmovió a Gonzalo, que comprendía su sacrificio, al termino de recorrer la larga alfombra se ubico al lado de Gonzalo, lo miro entre la tela, le sonrío, y lo tomo de la mano, una lagrima rodó por la mejilla del conmovido muchacho que se aferró a ella tierna y tímidamente.

La ceremonia prosiguió normalmente y pronto salieron y fueron despedidos por sus familiares y amigos, luego de recibir el arroz corrieron al pequeño volkswagen rojo con un hermoso moño en el techo y emprendieron su viaje de luna de miel, ya que ambos decidieron que lo mejor era partir lo antes posible.

El auto tomó la panamericana y se dirigió camino a Córdoba que era el lugar elegido por ambos. Ya pasado un rato salieron de la autopista y se detuvieron en una estación de servicio donde aprovecharon a cambiarse y comprar algunas golosinas y bebidas para el viaje. Salieron juntos y Selva extrañamente llegó primero al auto, Gonzalo se acerco lentamente y la beso en los labios y ella lo besa igualmente, el saco del bolsillo de sus bermudas un chocolate y se lo dio y ella sonríe radiantemente, él sabia que ella era feliz solo con verla y ella sabia que el seria feliz mientras ella lo sea.

Tomaron de nuevo la autopista y Selva encendió la radio del auto, escucharon un par de canciones vacías hasta que sonó una vieja tonada de los offspring que juntos tararearon durante el transcurso de la letra, se miraban y se sonreían recordando una vez que juntos vieron el vídeo y rieron conjuntamente durante un rato, ella se acercó y lo beso delicadamente y le susurro al oído -Te amo.- y él la miro y le contesto -Yo también te amo.-

Pasaron la autopista y entraron a la ruta 8 que Selva conocía perfectamente ya que ella solía ir de vacaciones con su familia hacia su casa en Córdoba todos los años lo que le trajo algunos recuerdos que la hicieron llorar, él la miro durante unos instantes pero sin quitar el ojo de la ruta pero no supo que decirle mientras que luego de un instante ella se sumió en un sueño algo inquieto, y el se tranquilizo un poco, prendió la ventilación del coche y la dirigió a ella para que no sufriera el calor y se concentro en el camino.

Luego de un par de horas Selva seguía durmiendo, y Gonzalo comenzó a aburrirse, pero decidió que luego tendrían toda la vida para conversar, y prefirió continuar con el camino, subió un poco la radio y encendió las luces del auto, ya que comenzaba a oscurecer. En el preciso instante que prendía las luces una señal lo obligo a detener la marcha, pronto alcanzo un cartel de desvío y tomo según la indicación un camino de tierra, igualmente Selva no mostró signos de despertarse y él prefirió no llamarla, condujo durante algún instante por la tierra y noto un cartel anaranjado con varias flechas, pero se encontraba tachado con aerosol y no pudo distinguir nada de lo que decía, así que continuo durante unos 30 minutos por el mismo camino.

Manejo hasta que un charco detuvo el vehículo, pues el barro que rodeaba la rueda delantera resultaba un duro escollo para el auto cargado como se encontraba, Gonzalo apagó el motor y encendió la luz de adentro, bebió un sorbo de una lata y reclino el asiento, de día podría ver mejor las cosas, el viaje había terminado por hoy, apago la luz, bajo mas la radio y se durmió profundamente en pocos minutos.

El sol entró por la ventanilla delantera del auto y ilumino a la joven pareja cálidamente, Gonzalo volteo el rostro, pero Selva se despertó al sentir el calor, miro a su amado, miro el camino, volvió a mirar a Gonzalo, y luego miro de nuevo el camino y dijo- Nos perdimos.- y su rostro mostró una sonrisa dirigida a Gonzalo, estiro su brazo tomo la bebida y bebió unos tragos, luego abrió la puerta y bajo del auto suavemente para evitar que el despertara.

Lo primero que observo fue la rueda trabada, y luego noto que el camino de tierra no podía ser transitado mas allá de donde estaban, pero detrás de él no podía localizar el asfalto y eso la enfureció, como no la había despertado, si ella conocía el camino, el siempre quería tener la razón y ella realmente  noto que el se equivocaba cada vez mas seguido, pero unas terribles ganas de orinar le quitaron el pensamiento de la mente, y se encamino hacia unos arbustos, luego de terminar con sus necesidades se dirigió al auto y decidió despertar a Gonzalo, para ello prendió la radio a todo volumen, pero no sonó ninguna emisora, así que coloco un cassette y este estallo al instante, Gonzalo se despertó sobresaltado y su expresión de susto cambio por Una Sonrisa cuando vio a Selva reír a carcajadas, ella estaba cerca suyo y lo beso, se besaron nuevamente y él acaricia su cabello –Siempre soñé con despertar a tu lado, mi amor, pero la música esta de mas.-, y juntos rieron por un instante, ella lo miro y con voz sexy contesto –La próxima prometo que será distinta- y volvieron a reír.

Gonzalo bajo del auto y miro la rueda atorada, Selva se acerco lo miro y le dijo-Como nos metimos en semejante lío?- Él levantó los brazos y sonrío-   creo que me perdí- dijo tímidamente. –Ya veo, pero porque no me despertaste, podíamos haber encontrado antes el camino vos sabes que conozco muy bien la ruta-. –Habia un desvio y me dio pena despertarte, vi alguna señal detrás pero no creo que sirva, porque estaba pintada con aerosol, pense sinceramente que este camino llegaria a alguna ruta-. Luego de mirarse se abrazaron y sonrieron, juntos buscarían una solución.

Gonzalo buscó el críquet mientras Selva tomó una rama de gran tamaño para ubicar debajo de la rueda, en un primer intento obtuvieron el hundimiento del críquet y en el segundo el barro cubrió parte de la ropa de viaje de Selva, pero el auto se libro del atascamiento. Antes de partir Selva se cambio la remera sucia mientras Gonzalo la molestaba, volvieron a reír, y subieron al auto para continuar su camino.

El camino parecía no llevar a ninguna parte, solo podían ver arboles y pasto, no existía ningún alambrado, ni zanja, pero a medida que abanzaban el camino parecía mas cuidado y más seco, el sol iluminaba con su mejor color, el cielo mostraba algunas formas pero no dibujaban mas que pequeñas esponjas que flotaban, lo mas extraño era que no se escuchaba mas que el motor del auto, no había ningún sonido externo, el silencio parecía dominarlo todo y nada lo perturbaba.

Selva suspiró profundamente, y Gonzalo sonrió al instante, la miro y le dijo –Si, ya lo sé, cada vez estamos mas desorientados-. Ella lo miró y contesto –Creo que deberíamos volver y mirar ese cartel-. Gonzalo giro en u y dirigió el auto de nuevo al camino por donde habían venido en búsqueda de la señal.

Luego de conducir durante largo rato un camino de asfalto surgió delante de ellos a lo cual Gonzalo detuvo el auto, luego de mirar en ambas direcciones miro a Selva con una mueca de preocupación con algo de confundido – y ahora que?, este camino es nuevo, pero antes no lo vi.-le dijo extrañado –Aquella señal no es la que vos vistes?- y Selva señala un cartel naranja con tres nombres y algunos números que denotaban distancia.

Gonzalo sonrió tontamente. –Que raro, parecía que se encontraba tachado con aerosol- y miro a Selva mientras esta le contemplaba algo despreocupada.-Yo pienso que tenes que ponerte lentes, mi amor.-le dijo sin pensar. Gonzalo la miro y se reclino, pero no sonrío ante la broma de ella, miro el letrero pero los nombres le resultaron extravagantes y a su vez un poco tétricos, Villa oscura y Paseo final, no le parecían hoteles de luna de miel, y mucho menos le brindaba alguna tranquilidad. Selva se apresuro y dijo- Elegí alguno, yo tampoco los conozco. Allí le preguntaremos a alguien como tomar la ruta-. Y Gonzalo decidió tomar la derecha hacia Villa oscura, que parecia la más cercana a donde se encontraban.

El asfalto llegaba hasta un pequeño puente de un solo sentido que cruzaba un arroyo que parecía de gran caudal, ellos cruzaron el puente con desconfianza y tuvieron algunos sobre saltos al escuchar el crujir de las maderas que pisaba con las ruedas, además parecía que nadie hubiera cruzado desde hacia muchos años y eso realmente los asombro más. Estaban ante un verdadero pueblo escondido.

Pronto llegaron al poblado, pero para su sorpresa encontraron él autentico pueblo fantasma, un camino de tierra cuyo centro era cortado por plazoletas de césped descuidado parecía mostrar una avenida principal, y algunas casas de viejas estructuras hacían las veces de locales y daban forma a un pequeño paraíso desierto en el medio de la nada.

  Gonzalo detuvo el auto a unos metros de lo que parecía el edificio municipal y ambos descendieron del mismo lentamente, luego de estirar las piernas se dirigieron hacia la entrada del edificio.

  Selva abrió suavemente la puerta y miro al interior del lugar sigilosamente pero el olor a humedad lleno súbitamente sus pulmones y la obligo a cerrar los ojos, retroceder y toser al mismo tiempo Gonzalo la sujeto y le pidió que se tomara un instante para adaptarse y poder entrar.

Gonzalo y Selva se tomaron de las manos y entraron temerosamente, paso a paso ingresaron al salón de estar, la sala era muy oscura y se encontraba compuesta por muebles de roble de varios años de antigüedad los cuales conferían un autentico aspecto lúgubre a la abandonada habitación pero nada podía ocultar el feroz rostro escondido tras las sombras de la pared, delante de unas temibles e imponentes escaleras, cubiertas por una alfombra negra cubierta de polvo, una criatura bestial casi mitológica los observaba desde la oscuridad, sus dientes resaltaban blancos como leche y sus ojos de color celeste en forma de gota se movían lado a lado como tratando de analizar a los recién llegados.


Gonzalo se aproximo a una ventana y de un movimiento dejo paso a la terrible luz del sol que ingreso en la habitación abruptamente sin dejar de iluminar el lugar por completo, y lo que hubiera sido que ellos vieron pareció solo una ilusión, un hombre de gran musculatura, cabellos rubios desprolijamente arreglados, ojos celestes parecidos a los de un gato, y de gran estatura se encontraba sujeto a una estatua de alguna clase de animal parecido a un duende en el pilar de las escaleras, Gonzalo confuso miro a Selva pero noto que ella no le prestaba atención.

Selva-Disculpe la intromisión pero estamos algo asustados y verlo así nos impacto, seria posible que nos prestara ayuda?- El hombre miro sigilosamente, y con voz tenue y dulce contesto, - No tiene de que disculparse, lamento no haber contestado su llamado, pero estaba descansando, cuando los escuche entrar decidí ver que sucedía- Y al terminar sus palabras esbozó una amistosa sonrisa, que solo inquieto a Gonzalo aun mas pero al parecer Selva no pensaba lo mismo, -que necesitan amigos míos- Termino el hombre mirando hacia Selva que aun dejaba sobresalir una pequeña sonrisa, -Buscamos la ruta 8 hacia Córdoba, Gonzalo la perdió al enfrentar un desvío y llevamos ya varias horas extraviados-Dijo Selva.-No se preocupen yo puedo indicarles el camino, esperen que los acompaño hasta su auto, y desde la calle comprenderán mejor mis indicaciones- dijo el hombre.

El hombre camino lentamente hacia ellos, se acerco a Selva, le tomo la mano y la condujo a la puerta, Gonzalo impaciente se acerco pero cuando trato de separarlos noto que Selva volvía a sonreír y la rabia le lleno el ser, camino torpemente hacia ellos y callo, al caer su pierna piso una tabla floja y esta se rompió junto a algunas de sus compañeras y Gonzalo encontró una trampa que lo precipito hacia la profundidad de una cueva que contaba con varios metros de altura, para su suerte un pequeño arroyo subterráneo amortiguo su caída y evito que se destrozara pero no pudo evitar que quedara inconsciente en el instante en que toco la superficie próxima a un flojo suelo que termino de frenar su caída.

Selva escuchó un sonido crujiente y volteo su rostro como si despertara de un sueño y vio a Gonzalo caer en la oscuridad y cuando trato de alcanzarlo notó que una suave mano impedía sus movimientos bruscamente, miro de nuevo hacia  delante y vio a un sujeto que sentía conocer pero que jamás podría reconocer que le sonreía salvajemente pero que mostraba signos de confusión al ver que ella despertaba de su dominio, supo al instante que ella quería al joven porque al verlo en peligro solo le importo el, pero no dejaría que ella escapara de sus garras, la miro y le dijo-Tranquila, se rompieron algunas tablas viejas, ahora ayudaremos a tu amigo- pero Selva movió sus brazos tratándose de librar de ese hombre, y le respondió –Suéltame, déjame ir, -pero no pudo escapar, el hombre la miro confuso y apretó mas fuerte su mano y Selva gimió de dolor cayendo de rodillas al suelo delante de él, - debes detenerte mujer o te lastimare- le dijo y sonrió tiernamente, Selva miró el rostro del hombre, y noto que el dolor era demasiado intenso, -por favor, debe soltarme, que quiere de mi?- y el hombre la miró, apretó hasta verla derramar lagrimas y sonrió espléndidamente ante ella, Selva no pudo con el dolor y grito lo mas fuerte que pudo, y el hombre la golpeó en el rostro arrojándola inconsciente hacia el suelo.

Gonzalo despertó luego de un instante al escuchar el grito de Selva, y se incorporo lo más rápido que pudo pero no tuvo oportunidad de afirmarse y cayo de inmediato al agua, se incorporo lentamente en un segundo intento pero al encontrarse de pie solo pudo sentir el agua debajo de él ya que la oscuridad era impenetrable, -Suéltala maldito!!- Grito pero el sonido solo produjo eco en la oscura caverna.

Gonzalo permaneció de pie durante unos minutos, pero el tiempo le parecía mas corto en cada instante, desorientado por la caída trato de avanzar pero al no contar con una luz para poder ver golpeo su pie contra algo, se agacho y trato de buscarlo con sus manos, cuando pudo sentir lo que lo había detenido la desesperación se adueño de el, un cuerpo se encontraba ante el y por lo que pudo tocar estaba desgarrado por todos lados, parecía llevar algunos días o algún par de meses allí, y el temor lleno súbitamente su ser, al tactar cerca suyo otro cadáver y otro, y otro mas, rodeándolo por todos lados, un arroyo lleno de seres desmembrados y desgarrados se hallaba ante el y sabia que pronto el formaría parte de el, Gonzalo se movio en busqueda de una salida, avanzando entre los cadaveres putridos y los esqueletos para de pronto encontrar una pequeña abertura donde una palida luz parecia florecer a una larga distancia, lo cual lo animo, se deslizo dentro de la cueva y avanzo hacia la luz.

  Selva desperto abruptamente de la inconciencia sin tener nocion del tiempo transcurrido, miro alrededor y se dio cuenta de que estaba en una habitacion y se hallaba recostada en una cama, un elegante vestido colonial colgaba del marco de un espejo de pie hergido delante de ella y pudo ver en el el reflejo de su rostro, lo cual la hizo llorar puesto que el pequeño movimiento la hizo sentir el dolor del golpe que tenia en su rostro que parecia haberse concentrado en sus mejillas enrojecidas. Se levanto lentamente y luego de haber intentado abrir la puerta pudo darse cuenta de que debia ponerse el vestido para que algo ocurriera. Se cambio sutilmente delante del espejo y se arreglo el cabello en un rodete lo cual la hizo llorar trayendo a su memoria el atuendo de su boda y penso,-que luna de miel estoy pasando- y se sento al pie de la cama entre sollozos y un llanto melancolico. El no podia haberse ido asi de su lado, ya nada le importaba si el no estaba, pero ella sentia que el aun estaba con vida, odiaba  imaginarlo buscandola en la oscuridad, llamandola, o pidiendole ayuda, ella no podia creer lo que estaba susediendo, lo queria, lo extrañaba, pero sentia que el iba a nesecitar mas su ayuda que ella donde quiera que el estuviera.

Gonzalo se arrastro por la pequeña abertura y esta a medida que el avanzaba empezo a ampliarze lentamente, pronto alcanzo la luz y esta lo enseguecio debido a su acostrumbramiento a la oscuridad.

Una pequeña habitacion se abrio ante sus ojos, donde una vela iluminaba las oscuras paredes, una figura semejante a una persona se encontraba al otro extremo, de respiracion entrecortada daba signos de contar con vida, pero parecio no percatarse de la intromision de Gonzalo que creyo haber hecho el suficiente ruido posible, trato de hablar pero su garganta se habia cerrado sin permitirle decir palabra alguna, la figura volteo y lo miro durante un instante, pero no hizo ningun comentario, el noto que era una mujer, joven de cabellos rubios iguales al hombre que conocio al llegar, de rostro palido y mirada vacia pero con un sutil color en su piel que llamo su atencion. Ella lo obserbo otro instante y le dijo, - mi hermano te dejo en mis manos, el me alimenta porque no puedo salir, pero por lo general los envia muertos, tu eres distinto, yo no quiero lastimarte, acercate...- Gonzalo dudo por unos instantes y sintio una leve presion mental que se adentro en el, cuando su cuerpo comenzaba a obedecer las ordenes de la joven entendio porque Selva se dejo llevar por aquel extraño ser; Gonzalo penso en su amor y se detuvo, ella lo miro y volvio a dirigirse a el – Tienes una voluntad bastante fuerte... seguro amas demasiado a alguna joven, pero igual seras mio, debo alimentarme de ti sino no podre sobrevivir. Es una pena que debas morir, tu fuerza seria util para salir de aquí, pero como veras estoy debil, debido a que mi hermano no me alimenta muy seguido ultimamente,- Gonzalo la miro y miro hacia la pequeña entrada, decidido se echo a la fuga, se arrastro velozmente a pesar de su cansancio y penso en su esposa que estaba con aquella criatura que comia carne humana, el debia llegar a ella antes que el la matara, pero primero tenia que escapar de alli.

Selva observo al espejo la ropa que se habia puesto, extrañamente parecia pertenecerle a ella, puesto que le quedaba a medida, espero durante un largo rato hasta que la puerta cedio, se abrio subitamente ante ella, primero desconfio, pero decidio que debia levantarse y salir de alli, camino paso a paso por un extraño pasillo que parecia no acabar mas, y comenzo a impacientarse, pero no quiso detenerse por nada, de repente se encontro en la escalera de la entrada, que le recordo lo que habia sucedido, se apeno cuando se dio cuenta que no pudo controlarse y penso que si salian de esta tendria que soportar una escena de celos a la cual Gonzalo la tenia acostumbrada, se aproximo a la figura pero l orroriso y decidio alejarse lo antes posible descendiendo por las escaleras, cuando llego al final de la escalera miro hacia la puerta y penso en salir para buscar ayuda, pero en ese mismo instante penso que seria muy inocente pensar que la puerta estaria abierta, y camino hacia lo que penso seria un viejo comedor para buscar una escalera hacia donde se encontraba Gonzalo, al entrar descubrio una mesa esplendidamente tendida y noto que una fuente con tapa decoraba el centro de la mesa, unas velas proporcionaban un ambiente romantico, y  pudo ver que los utencillos se encontraban distribuidos en los extremos, Selva camino lentamente por la habitacion observando libros y todo tipo de antiguedades que se encontraban en unas pequeñas marquesinas amuradas a la pared, miro el resto de las velas y rodeo la mesa rapidamente al notar una puerta que se encontraba del otro lado.

Selva alcanzo la puerta, pero esta se abrio antes de que pudiera hacerlo ella, el hombre rubio salio de la profunda oscuridad y se presento ante ella,- Me recuerdas, nos conocimos cuando llegastes, mi nombre es Nicanor, ven acercate a la mesa,- pero Selva lo recordo al instante y retrocedio al verlo,-Donde esta mi esposo?-pregunto temerosamente, y Nicanor la miro astutamente,- Tubo la mala suerte de toparse con una madera vieja y putrida, se lastimo un poco, pero se encuentra bien, quedate tranquila, descansa arriba, tuve que golpearte porque tu estabas alterada y senti que podias lastimarte, no temas, no volvere a hacerte daño, ven toma asiento...,- contesto el hombre, Selva sin creerle todo, se dejo conducir, savia que debia seguirle el juego y esperar alguna oportunidad para escapar, y ademas parecia muy agradable, y eso la hacia desconfiar aun mas. Selva se sento en un extremo y el hombre en el otro.

-Te ves muy hermosa con ese vestido,-Dijo Nicanor, -Gracias,-contesto Selva, mientras forzaba una sonrisa un tanto confusa. –Que pena conocernos de esta manera,-argumento Nicanor, -a que te refieres?- provoco Selva, -Podriamos avernos relajado mucho mas, no te gustaria cenar en el balcon?-arremetio Nicanor. Selva lo miro desconcertada, mientras el hombre le sonrio, se levanto y se acerco a ella, puso su rostro en su mejilla y le susurro al oido, -Seria mucho mas romantico,- y cuando acercaba sus labios para besarla Selva se inclino hacia un lado, el hombre la miro y se dio cuenta que no podria tenerla tan facil como esperaba pero sabia que de todas formas seria suya.

Gonzalo se arrastraba lo mas rapido que podia sabiendo que luchaba por su vida pero la criatura se aproximaba cada vez mas y no habia lugar adonde esconderse, cuando salio del pequeño tunel cayo al agua y choco con los cuerpos, la criatura salio despedida como un animal salvaje, y sus ojos cambiaron de color, brillaban en la oscuridad, mientras Gonzalo se volteo y la vio venir supo que habia cambiado, sus pasos ya no eran de solo dos piernas, y ya solo emitia sonidos precarios apagados ni proximos al de un ser humano, el no dudo un segundo debia matarla, pero la criatura arremetio contra el y lo mordio en la mano arrancandole la carne de su palma, el gimio de dolor y patio a la criatura con todas sus fuerzas en lo que penso era su estomago, y vio como la criatura retrocedio del dolor, el se tomo el brazo para sentir que le habia hecho, ya que no habia ninguna luz que le permitiera verse, luego estiro su brazo y tomo un hueso que yacia en las sombras, cuando la criatura se avalanzo nuevamente sobre el, lo sostuvo firmemete y sintio como la sangre baño su mano y como la criatura grito de dolor, cayo sobre el pesadamente y su cuerpo se sintio humano, la criatura volvio a ser la joven que el habia visto antes de poder  terminar con ella, pero a el igualmente no sintio que su apariencia lo hiciera verlo como a un ser que no fuera demoniaco y bestial, y se la quito como pudo de encima.

Nicanor se aparto de Selva por un segundo, pero  arremetio mas decididamente contra ella, la tomo del brazo sutilmente y acaricio su mano, la tomo por la muñeca y la levanto de la mesa,-Mejor comeremos aquí,- y estiro su brazo hacia la bandeja, la levanto y  descubrio la cabeza de un hombre con una manzana entre los dientes, cuando Selva quiso escaparse la criatura apreto mas y los ojos del hombre en la mesa se movieron hacia ellos, Selva estallo en llanto y Nicanor con su brazo libre dejo al descubierto unas feroces garras, tomo al hombre de la mesa y lo levanto, su cuerpo se hallaba desmembrado pero su torso aun estaba con vida, se agitaba onduladamente una y otra vez y la sangre brotaba de los sitios donde alguna vez salieron sus miembros, estaba desnudo pero aun sus partes sexuales habian sido arrancadas, Nicanor lo sostuvo, solto a Selva contra el suelo y tiro los restos del hombre nuevamente sobre lo que habia quedado de la mesa, la miro y dirigio su mano humana hacia su rostro pero Selva entre llantos y gritos cayo antes que el pudiera volver a alcanzarla, en ese mismo instante un horrible grito animal hizo eco en la habitacion, Nicanor se paralizo en el acto y supo que su hermana habia sido asesinada, se paro inmovil mientras Selva lo trataba de obserbar, y cambio de forma delante de ella, sus piernas se tornaron  como las de un lobo, pero de temibles proporciones, mientras sus ojos se tornaron amarillos como los de un gato, su espalda se ensancho y tomo la forma de una horrible joroba y en el instante que Selva se arrastro tras la puerta emitio un temible gemido animal y estridente que la asusto aun mas, se levanto y corrio hacia la puerta.

Gonzalo se levanto y sintio una terrible punsada de dolor, y un terrible sonido lo hizo pensar en Selva olvidando su propia herida, corrio hacia donde se encontraba el lugar por donde habia caido y salto con todas sus fuerzas impulsandose en una pila de cuerpos que se hallaba en el lugar, y sin contar con la vista aun estiro sus brazos lo mas que pudo a la vez que cerraba los ojos, sus brazos sintieron tocar una madera con sus manos y el dolor le resulto agudizarse extremadamente, trepo como pudo y dio con una escalera, que parecia cortarse donde el habia subido, una pequeña luz de querosen iluminaba el extremo superior permitiendole ver donde se encontraba, se paro mirando hacia la salida y salto lo mas lejos que pudo alcanzando el extremo mas lejano  que mostraba el camino hacia la unica salida posible.  Subio los primeros escalones desesperadamente pero al sonar el crujir de la madera bajo sus pies se detuvo instantaneamente.

Selva alcanzo el pestillo de la puerta y su primer pensamiento volvio a su mente –Y si la puerta esta cerrada?- y sin mirar atrás se avalanzo sobre el pestillo.

Gonzalo levanto su pie derecho suavemente y toco la madera, esta le parecio firme y dio otro paso hasta pararse en ella, asi paso a paso subio los escalones, uno a uno, ya faltando diez escalones la puerta se veia claramente, y la desesperacion lleno su ser, corrio la mas rapido que pudo y faltando cuatro escalones su mas temible miedo se presento, la madera hizo eco de un sonido crujiente hasta llegar a sentirse el quebrar de la debil y putrida tabla, y Gonzalo sintio sus piernas caer entre el escalon al vacio.

Selva estiro el brazo en un intento desesperado por abir el pestillo, toco la manija pero esta no abrio la salida y su mente le convido un sin fin de horrores que la temida criatura le iba a enseñar mientras disfrutaba de su carne, y el miedo apreto en su vejiga haciendola sentir una aguda punsada de dolor, mientras una gota de orina manchaba su ropa interior.

Gonzalo estiro sus manos y se sujeto de el escalon superior aunque quedo pendiendo  de solo uno de sus brazos ya que el dolor de su mano no le permitio mantenerla haciendo la fuerza que requeria por mas tiempo, en un esfuerzo desesperado, su brazo levanto su cuerpo lo mas que pudo y con el otro brazo sin emplear la mano lastimada se impulso hasta ponerse de rodillas en el siguiente escalon; cuando trato de levantarse la tabla sedio y el cayo al arroyo de donde habia salido.

Selva se volteo levemente y vio su alma alejandose de su cuerpo, y en un ultimo intento arremetio nuevamente hacia la puerta, esta se abrio ante sus ojos y la luz de la luna ilumino la habitacion, ella corrio lo mas rapido que pudo hacia el auto y se introdujo en su interior, subio el vidrio de ambos lados lo mas rapido que pudo y trabo las puertas, se sento del lado del conductor y de repente recordo que no sabia conducir puesto que jamas habia prestado interes al  auto.

Gonzalo se levanto en un movimiento cansino y recorrio con la vista el lugar donde se encontraba, miro la direccion de la luz y penso claramente, se dirigio al pequeño hoyo y se arrastro hacia la habitacion lo mas rapido que pudo, aun parecia no ser demasiado tarde para salvar a Selva.

El llego a la luz y se levanto, miro los detalles lo mas firmemente posible y comenzo a palpar las paredeas delicadamente, luego de un instante la desesperacion se adueño de el, y comenzo a golpear con su mano la pared, cuando comenzaba a darse por vencido, su mano toco un lugar que produjo un sonido vacio, pateo el lugar con todas sus fuerzas y una debil tapa de madera cayo delante suyo, una escalera en espiral subia hacia una puerta, aunque su altura era al parecer de de varios metros, el subio los escalones cautelosa pero rapidamente, con sus brazos sujetos a una baranda metalica.

Selva dio vuelta la llave y el auto se puso en contacto, volteo nuevamente y este se puso en marcha, recordo que Gonzalo siempre colocaba el freno de mano, cuanto lo extrañaria, seguro que Nicanor lo habia eliminado, pero ella traeria alguien que lo eliminara a el si ella antes no lo embestia con el auto, ella solto el freno y apreto el acelerador a fondo, pero el motor solo rugio, lo intento nuevamente, pero el auto no mostro cambio, miro el suelo del auto y vio los tres pedales, piso el primero, y noto que nada ocurria, la desesperacion se adueño de ella y de repente se sonrio al recordar que Gonzalo se comportaba algo cargoso con que ella aprendiera a conducir , -Si te  hubiera prestado un poco de atenci....- un terrible golpe sono junto a ella, el vidrio se quebro en varios pedasos pero se mantuvo sostenido completo entre ella y la criatura, ella grito, pero el sonido no pudo mas que absorberse en el interior del auto, la ciatura salto al capot del auto y comenzo a golpear las chapas, luego se arrojo al techo y este cedio sobre Selva unos centimetros, ella se agacho y trato del alcanzar el pestillo de la puerta.

Gonzalo abrio la puerta y se encontro con una gran mesa destrozada y un cadaver delante del suelo la sangre lo destrozo porque penso en Selva, pero la esperanza volvio a el en el instante que descubrio que el cadaver era un hombre. Gonzalo corrio hacia la puerta de entrada pensando en buscar a Selva en el piso superior cuando vio la puerta de entrada abierta, volvio al comedor tomo un cuchilo de plata y corrio hacia la salida, cuando salio de la caza vio el auto encendido, y a una temible criatura parecida a un lobo sobre el techo semi-aplastado.

Selva abrio la puerta y salio del auto cayo al suelo  y en el suelo se volteo, mientras se arrastraba tratando de alejarse lo mas rapidamente posible pero la criatura salto delante de ella y la obserbo amenazadoramente. Selva entre sollozos grito estridentemente cuando la criatura se transformo delante de sus ojos en ese hombre llamado Nicanor, este la miro y estiro un brazo ante ella, le sonrio y le dijo, -Nada seria mas importante para mi que la vengansa, pero tu serias la mejor forma de vengarme, uneteme y te prometo dar lo que tu necesites- delante de ella, desnudo, con un cuerpo perfecto, pero palido y sin ningun cabello mas que los rubios de su cabeza. Selva lo miro, y entre lagrimas sabia que el podria darle cualqueir cosa, pero jamas la amaria como Gonzalo lo hizo y solo pudo recordar su rostro y pensar que esa criatura lo habia matado, esa criaturea de apariencia humana que escondia un feroz animal salvaje, ella preferia morir ante el que pertenecerle, y se nego con la cabeza, el hombre Nicanor se enfurecio aun mas y le dijo- entonces luego de tener tu cuerpo te despedazare lenta y dolorosamente haciendote experimentar el horror mas inimaginable que pueda existir, y  estiro su mano arrancando parte del vestido de Selva dejando al descubierto su corpiño, subitamente el hombre Nicanor se detuvo, y una expresion de asombro y dolor se adueño de su rostro, Selva lo tenia agazapado sobre ella cuando su vestido o lo que quedaba se mancho de sangre, y Nicanor murio entre  gemidos y palabras desconocidas de maldiciones jamas antes  expresadas por ningun ser humano, mientras que detrás suyo quedo delante de sus ojos la figura de otro hombre, pero ella no pudo ver quien era ya que una terrible oscuridad invadio su mente, y cayo en un profundo sueño que le hizo perder la conciencia.

Selva volvio en si en un cuarto que le resulto familiar, y pronto pudo ver el horrible espejo,  donde antes se habia observado, estando en la misma cama donde se habia despertado algun tiempo atrás, pero su ropa,  estaba  vestida con su ropa de viaje solo que sin  sus bermudas, cuando las lagrimas se comenzaron a presentar en sus ojos la puerta se abrio suavemente, una mano vendada se asomo primero. Selva se levanto y tomo un objeto de la mesa parecido a una estatuilla, y lo alzo sobre su cabeza, cuando Gonzalo salio de detrás de la puerta, ella solto la estatua y corrio a sus brazos aferrandose a el cariñosamente.

Selva emocionada le dijo- Que ocurrio, te crei muerto... mi amor no queria seguir sin ti... –y Gonzalo la miro y le dijo- Mate la criatura con un cuchillo de la mesa, este era de plata pero no creo que hubiera alguna diferencia, yo no se que bicho era pero saber que queria hacerte daño supe que debia matarlo... cambiastes lo que el podia darte que seria inimaginable por mi sabiendo que lo que puedo darte ya te lo di...- pero Selva tapo con sus dedos sus labios,- Yo se que hay algo que el no puede darme, y eso es el amor que tu me brindas desde que te conoci, y ninguna riqueza terrestre o placer mundano reemplazara lo  que tu me das, me distes y me daras,- y gonzalo con lagrimas en sus ojos le contesto, -te amo,- y la beso tiernamente en los labios. Se besaron durante un largo rato y Selva le dijo- Viajaremos de dia?- y Gonzalo respondio –Si.- entonces tenemos tiempo para empezar nuestra Luna de miel- y sus labios se juntaron nuevamente hasta la eternidad. d

FiN

 


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