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La Valentía de Ser Rico

(The courage to be rich)

By Lydia Sargent.

Holaaaaa, soy la Sra. Geoffrey. Aquí estoy sentada en mi carísima casa del centro, en los terrenos del Hotel Sátira. Estoy mirando a travées de la ventana. Las flores mecen sus alegres capullos en el aire primaveral. Aun así estoy bastante triste. Un periódico, con titulares acerca de niños masacrando a otros niños en Littleton, (N.de. T. Se refiere a la Masacre del Instituto Columbine, en Littleton, Colorado, donde dos jóvenes de buena familia, dispararon indiscriminadamente contra sus compañeros de instituto, con un saldo de 13 muertos y 25 heridos, suicidándose posteriormente), acerca de los Serbios masacrando a la población de los Balcanes (o es Irak? Nunca sé muy bien de qué países hablan) cae de mi regazo al suelo, se forma una laágrima, aferro mi collar de zafiros de 20.000 dólares que mi marido Geofrey me compró ayer mismo en un impulso. ¿Qué será de nosotros?¿Seremos asesinados en nuestras camas? ¿Es que no cesará este terror? ¿Tendremos que renunciar a todo el dinero, duramente ganado, que heredó Geoffrey?.

Vago por nuestro adorable hogar, los dedos rozando ligeramente nuestras posesiones – la alfombra de 100.000 dólares del salón, el Van Gogh de 20 millones de dólares de la biblioteca.

Entonces llega mi marido Geoffrey a casa. La doncella entra en el momento justo con los cockteles y esos pequeños canapés que le gustan tanto a Geoffrey. Damos sorbitos, yo suspiro, le enseño los titulares acerca de Littleton y los Balcanes (¿o es Irán, Afganistán, Armenia?)

"Geoffrey" gimoteo, ¿qué es lo que le pasa al mundo? ¿por qué unos chicos perfectamente decentes (es decir blancos y con dinero de sobra) se matan unos a otros? ¿Es porque se aburren, están marginados y son mantenidos hasta mas allá de los 21 años?¿O es la violencia en la televisión y en las peliículas?¿O son esos espantosos juegos de computadora? ¿Y como afectará esto a nuestra herencia duramente ganada de 50 millones?.

Geoffrey seca mis lagrimas. "Tontita" dice Geoffrey utilizando mi mote cariñoso. "No debes preocuparte, nada puede hincarle el diente a la cantidad de dinero que hemos podido acumular desde los años de Reagan-Bush-Clinton?.

¿De verdad? Gorjeo...

Geoffrey dice que los tiroteos son una buena señal de que los chicos han vuelto a ser chicos, aunque mal dirigidos. Geoffrey dice que los recientes tiroteos no tienen que ver con la violencia en la televisión o con los videojuegos. Porque nosotros crecimos con películas del oeste en la televisión, dice. Nosotros pasamos nuestra infancia jugando a indios y vaqueros y disparándonos los unos a los otros. De hecho, creo que uno de los problemas es que nuestros chicos de hoy en día han sido privados de la oportunidad de reconstruir la matanza de nuestra población indígena.

Geoffrey dice que con el mundo dominado por pacifistas y feministas, los chicos no tienen válvula de escape para la agresión y el dominio tal y como hacían antes jugando a indios y vaqueros, a soldados, a marines, o simplemente pasando un día libre con papá disparando a animales. A los chicos no se les enseña a ser duros y competitivos, y ya no son traviesos de manera que papá tenga que atizarles a diario.

"No estarás diciendo..." murmuro, Geoffrey se está exaltando mucho con su discurso. Dice que todo el mundo piensa que la matanza de Columbine se debe a unos chicos que se salieron de madre y se convirtieron en unos psicóticos asesinos nazis. Pero no, dice Geoffrey, de lo que se olvida todo el mundo es que la matanza la hicieron unos chicos y América quiere que sus chicos sean así. Estos chicos simplemente no tenían otra válvula de escape aceptable.

 

Seguramente no estarás diciendo, Geoffrey, que debemos cambiar la sociedad para que todo el mundo, no solo los jóvenes tengan vidas dignas y satisfactorias construidas sobre la diversidad y la solidaridad con los otros?.

Bah! Dice Geoffrey. La solución para evitar estos terribles incidentes mal dirigidos no está en disminuir las fantasías de violencia virtual, sino en tener mayor cantidad de violencia real estructurada.

Geoffrey dice que los chicos necesitan:

Más tiempo de calidad con papá, es decir, boxeando y/o disparando animalitos y /o humillando o dominando a una mujer o a alguien más pequeño, preferiblemente no blancos, o especialmente que vivan en vecindarios de gente bien, donde claramente no deberían estar

Más guerras, en particular aquellas que incluyan bombardeos masivos, destrucción de edificios, y tropas de tierra para que vivan la cercana y humanitaria experiencia personal que significa una matanza humanitaria.

Más oportunidades no solo para odiar a gente inferior, sino para maltratarles, ya que este tipo de conducta prepara a los chicos para ser buenos padres y miembros destacados de nuestra comunidad corporativa/de feroz competencia /racista /sexista.

Más personas dependientes para darles ordenes/patear, preferiblemente mujeres o sub-humanos.

Geoffrey también dice que nuestro gobierno necesita patrullar los colegios en comunidades de color para evitar que esa gente masacre a la gente decente; aunque la mayoría de las masacres recientes hayan ocurrido en colegios blancos en vecindarios de gente rica, todavía el gran problema son los colegios de los ghettos.

Geoffrey afirma que debemos volver a la época en que las madres se quedaban en casa, porque eso evitará que los niños fabriquen bombas en sus dormitorios, al menos hasta que sean lo suficientemente mayores para cruzar la calle y hacerlas en otro sitio.

Y que lo digas, Geoffrey, me entusiasmo. "Eso me recuerda que he recibido un fax, justo después de la masacre en Colorado, de la Asociación Nacional de Mamás en casa", que tiene una pagina web, y publican una revista llamada "Mamá en casa". El fax dice que después de la tragedia del Instituto Columbine, en Littleton, expertos, políticos y ciudadanos preocupados, conjuntamente, están tratando de identificar los factores que contribuyeron a esta tragedia. Mientras se discuten muchos factores, tales como la violencia en el cine, los vídeo juegos, las letras de canciones, en la televisión y en Internet, la mayoría de la gente está de acuerdo en que el factor subyacente numero uno, es que nuestros chicos no reciben suficiente supervisión..... Mamasencasa.com (AtHomeMothers.com) ofrece información gratuita para padres (o sea: madres) que han elegido o les gustaría elegir la paternidad a jornada completa en casa.

"Debe ser verdad" digo, porque yo he sido una mamá en casa. Hacía que la niñera de nuestro hijo me lo trajera para estar con él durante, al menos, una hora cada día, y después......mira, lo bueno que nos ha salido¡, que ha sido presidente de Lockheed y todo¡. Aunque, gorjeo, no tuvo Hitler una mamá en casa? No era eso parte del programa Nazi? O era del Comunista? Me hago un lío...

"Eso no viene al caso", dice Geoffrey, interrumpiendo mis divagaciones sin sentido, para continuar diciéndome lo que hay que hacer. Dice que debemos inculcar mejores valores en nuestros ciudadanos, sobre todo en los padres con dinero. Dice que aunque el problema es que los chicos necesitan pasar más tiempo cazando conejos con sus papás, el otro problema del mundo actual es que mucha gente con dinero se siente culpable por ello. No tienen la valentía de ser ricos.

Geoffrey me enseña "La valentía de ser Rico" por Suze Orman, autora del Best seller, "Los 9 pasos para la libertad financiera".

Geoffrey y yo vemos el libro juntos. Me siento inspirada. Suze pregunta en el capítulo 1, ¿Porqué alguna gente tiene dinero mientras que otros no? Suze dice que la razón es casi mística, es decir, ella ha llegado a creer que el factor clave que determina lo que realmente tenemos es la manera en que cada uno pensamos y sentimos acerca del dinero. Ella dice que "cuando las emociones negativas controlan nuestro bolsillo, el dinero no fluirá pura y uniformemente". Ella dice que lo que evita que seamos ricos es simplemente la falta de confianza. Dice, que por supuesto hay algunos obstáculos externos, como la falta de dinero para empezar o de oportunidades, nuestro origen familiar, falta de conocimientos, incluso la pereza, pero esto puede ser fácilmente superable. Máas difíciles de superar son los obstáculos internos.

Suze dice que el dinero se siente atraído por gente fuerte y poderosa, que lo respeta, y está abierta a recibirlo. "El dinero se comporta y responde, como las personas, al cariño, y entonces crece, trátalo mal o fáltale al respeto y se reducirá a la nada".

Ella añade que la vergüenza, el miedo, y la ira pueden nublar nuestros juicios financieros, llevarse nuestro poder sobre nuestro dinero. Pero esos pensamientos de vergüenza y miedo pueden dar un giro si tratamos nuestros pensamientos como si fueran actores, siendo nosotros el director que controla si los mantenemos en escena o en las bambalinas.

"Geoffrey" digo, "Eso debe ser lo que les pasó a los padres de esos chicos de Colorado. Sus padres sentían vergüenza, y se la pasaron a sus hijos".

"Si, calabacita", dice Geoffrey. "Ahora lo vas entendiendo".

Continuamos leyendo. En el capítulo 2 Suze escribe que donde fluye el dinero, incluso un poquito de dinero, tenemos la capacidad de incrementarlo. Pero no es suficiente apartar pensamientos y palabras de pobreza. Debemos utilizar palabras de riqueza. Cualquier palabra que se repita con la suficiente frecuencia se convierte en realidad. Suze dice que necesitamos decir alto y a menudo "Tengo la valentía de ser rico". Debemos actuar como si ya hubiéramos conseguido nuestro propósito.

En el capítulo 3, aprendemos acerca de la valentía de hacer espacio para más dinero. Debemos alinear nuestros pensamientos y palabras, debemos librarnos del desorden interior y del desorden material. Suze dice que "menos es más", en este contexto significa que el desorden bloquea el camino para hacer más dinero. Debemos ir por nuestra casa y tirar 20 artículos materiales y 20 artículos de ropa. Debemos recoger todas las monedas que tenemos perdidas y colocarlas en una "Jarra de la abundancia".

Nos detenemos mientras me apresuro a recolectar las monedas perdidas bajo los cojines de nuestro sofá de 5.000 dólares y las coloco en nuestro jarrón Ming de 150.000 dólares.

Suze cree que el dinero tiene una fuerza vital en sí mismo. En el capítulo 4 aprendemos a tener la valentía de dar valor al dinero. La primera regla del dinero, dice Suze, es "Primero la gente, después el dinero, después las cosas".

"Eso es tan profundo y tan lleno de sentido", trago saliva, conmovida mas allá de las palabras

Suze dice que debemos privarnos de algunas cosas para tener dinero para invertir; y comprar más cosas, -cosas que realmente valoremos, lo contrario del desorden. Para ser ricos, nuestra autoestima tiene que crecer junto con nuestros dividendos. Debemos creer que nos merecemos ser ricos.

En el ultimo capítulo nos dice cómo invertir y mejorar nuestro dinero, cómo introducir la riqueza en nuestras relaciones. La intimidad financiera en una relación, dice Suze, puede ser la manera mas profunda de cercanía que hay.

"Que gran verdad", murmuro, acariciando la cartera de Geoffrey. El responde sacándose..... .....su última compra: un collar de diamantes de 70.000 dólares para demostrar nuestra intimidad.

Suze nos dice cómo, una vez que "creamos en nosotros mismos y en nuestro dinero de la misma forma en que creemos que el sol saldrá cada mañana, seremos ricos".. Ricos, no solo en dinero, sino en relaciones, ya que el dinero ayuda a elevar nuestro estatus con la gente. También nos hace gente más generosa ya que valorar el dinero, gastarlo con sabiduría, invertirlo y protegerlo, es, de acuerdo con Suze, un acto de generosidad. El dinero nos otorga un sitio en el mundo.

"No me extraña que dieran un reportaje sobre el libro de Suze en la Televisión Puública" canturreo. "Es tan sabia y tan precisa en su análisis económico".

"Si", dice Geoffrey, dando palmaditas a su cartera de acciones, lo que me conduce a cúspides de excitación.

Para darle a la riqueza y a la abundancia un lugar entre nosotros, que permita al mundo vivir entre nosotros, debemos dar dinero, por nuestro propio bien, así como por el bien del mundo, ya que al dar dinero tendremos una actitud expansiva y de ricos, y no restringida y de pobres, dice Suze.

Suze cree que nuestra responsabilidad en la vida es mantener el dinero siempre en movimiento, ya que en el flujo continuo está la pureza y finalmente la riqueza. Ahorrar detiene el flujo. Si somos respetuosos con nosotros mismos y nuestro dinero; respetuosos con lo que significa el dinero y cómo lo gastamos, y conscientes de cómo nuestras acciones afectarán a nuestros seres queridos, seremos ricos. Y no necesitamos competir. El viaje es nuestro. Suze nos anima a tomar las valientes decisiones necesarias para ser ricos. Por que las recompensas de la riqueza son grandes y las privaciones de la pobreza son paralizantes y TOTALMENTE INNECESARIAS.

Dice Suze: "Por más dinero que tengas ahora, muévete hacia él hoy mismo, ya que con valentía puedes hacer que crezca hasta ser suficiente, hasta ser más que suficiente"

Oh! Geoffrey, suspiro "Confieso que me sentía mal por todos nuestros millones, pero ahora creo que ser rico es algo hermoso, puro y generoso".

Geoffrey asiente y toca mi pulsera de oro de 12.000 dólares. "¿Pero no te das cuenta de que este libro nos ayuda a entender qué es lo que va mal en nuestra sociedad?"

Geoffrey dice que los padres de Littletton no tuvieron la valentía de ser ricos y transmitir los valores de dinero/autoestima a sus niños. Los padres estaban claramente avergonzados de su dinero y los chicos lo descubrieron, se sintieron humillados y arremetieron. Si, fue trágico, pero no porque queramos que los chicos sean pacifistas y comedores de yoghurt dominados por chicas feministas. No, queremos que sean unos manitas haciendo bombas y que estén ansiosos por bombardear utilizando las últimas armas de alta tecnología. Solo queremos que las usen de forma más humanitaria, por ejemplo, destruyendo la infraestructura de otros países -preferiblemente los del tercer mundo-, o que sean miembros de equipos SWAT, arrasando comunidades en ghettos a fin de prevenir la violencia.

Geoffrey dice que en lo que se refiere a la Crisis de los Balcanes y todo eso, que América se ha sentido muy culpable por ser el país mas rico del mundo, y esa culpa nos ha impedido poner el pie en cualquier lugar donde el mal ha levantado cabeza. Los recientes bombardeos de Yugoslavia demuestran que ahora tenemos la valentía de ser ricos, lo que conlleva la responsabilidad de bombardear la mierda que haya en cualquier país y que interfiera con el flujo de dinero.

Oh, Geoffrey, gorjeo, "No te imaginas lo feliz que me hace esto. Confieso que a veces tuve el sentimiento de que no merecíamos los millones que heredamos de tu abuelo, el potentado especulador, dueño de una mina y dueño de casuchas de alquiler para los pobres, y su mujer -que se quedaba en casa. Es refrescante saber que su dinero no proviene del robo descarado y de la explotación, sino de su actitud y valentía acerca del dinero."

Geoffrey asiente, y decidimos echar unas cuantas monedas de nuestra jarra de la abundancia a algún pobre que pase por nuestra carísima casa en algún lugar de los líimites del Hotel Sátira. d


¡¡Arriba las manos!! ¡¡Arriba las manos!! ¡¡Arriba las manos!! ¡¡Arriba las manos!! ¡¡Arriba las manos!! ¡¡Arriba las manos!! ¡¡Arriba las manos!! ¡¡Arriba las manos!!

 

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